miércoles, 19 de octubre de 2016

La Princesa Kaguya - Studio Ghibli



Esta película está basada en un cuento japonés del siglo X, el cuento del Cortador de Bambú considerado el texto japonés más antiguo que existe. Es una alegoría del ciclo de la vida, donde se aprecia todas las etapas de crecimiento de Kaguya en un ambiente apacible, tal como lo es su espíritu lunar.
Este cuento habla de cómo unos ancianos que no podían tener hijos encuentran una hermosa princesita dentro de un tallo de bambú. Kaguya significa "luz brillante" y provenía de la luna. Al llegar a casa, se convierte en un bebé y empieza a desarrollarse como un ser humano de la tierra. La princesa por momentos entona melancólicas canciones sin saber por qué. También crece rapidísimo como el bambú, por eso sus amigos del campo la llamarán tallo de bambú. Ella se cría sanamente en la naturaleza de manera sencilla y libre. Hay una admiración de Takahata, el octogenario director de la película, por la naturaleza, por la vida sencilla y sin imposturas. 
Mágicamente, los padres de Kaguya, reciben del bambú una gran riqueza y hermosas telas. Ellos lo interpretan como un mensaje del cielo que les dice que deben llevar a su hija a la ciudad y educarla en la tradición de la nobleza japonesa. En la película hay una crítica a esta tradición porque ella cuestionará todo el tiempo a su institutriz. Kaguya quiere dibujar libremente, cantar, caminar como le plazca, pero las normas indican que debe hacerlo todo de una manera muy estudiada, recatada y específica. Ella aceptará todo esto por amor a sus padres quienes tienen ilusión por verla hecha toda una dama. Pero por dentro sufre. 
Luego vendrá toda una parafernalia relacionada con la ceremonia de su maduración y la aparición de cinco pretendientes quienes no satisfacen las expectativas de la princesa. Ella les pide cosas imposibles como muestra de su amor y ellos consiguen farsas que ella descubre fácilmente. Al principio ella se reirá pero al final es tal la decepción que ella llorará. Lo peor de todo vendrá cuando llega el mismo Emperador a pretenderla, pero lo hace de manera violenta y autoritaria, quiere obligarla a ser una más de su corte. Kaguya escapa pero ya no deseará más vivir entre los seres humanos y pedirá a la luna que se la lleve. 
La partida de Kaguya es sumamente conmovedora, ver a sus ancianos padres haciendo todo lo posible por evitar perderla y verla partir de este mundo, nos hace sentir el desconsuelo de la pérdida. Ahora Kaguya sabe lo que es ser humano y la dulzura y acidez que eso conlleva.
La película está hecha en un estilo de dibujo muy sencillo y delicado como hecho a mano, pero muy hermoso, tal como son las acuarelas japonesas y tiene momentos en que la acción se manifiesta con trazos gruesos y pinceladas que hacen sentir más intensamente el movimiento. Es una  belleza de película. Se puede apreciar la elegancia de las formas, la delicadeza de los rasgos, la presencia de los objetos en esa sencillez. Todo narrado de forma poética.
La música de Joe Hisaishi es, como siempre, un agradable y acogedor ambiente para la película.
La princesa Kaguya es un poema hecho película, para verla y disfrutarla plácidamente. 







 

 








viernes, 7 de octubre de 2016

Ponyo -Studio Ghibli

Ponyo en el Acantilado, llamada en América Latina Ponyo y el Secreto de la Sirenita es una película de Studio Ghibli, dirigida por Hayao Miyazaki. Premiada con el León de Oro del Festival de Venecia en el 2008, está basada en la historia de la Sirenita de Hans Christian Andersen. 
Ponyo es una creatura ambigua, que tiene padres de dos naturalezas distintas. Su padre es un mago humano y neurótico, decepcionado  de los humanos. Su  madre es una diosa marina de enorme belleza y poder. Ella misma tiene cara de niña y cuerpo de pez, es un ser dual que tiene la riqueza de su mundo marino y la magia de su padre y la fuerza enorme de su madre. 
La historia narra la transformación de este ser marino en una niña. Ponyo es un pez que quiere ser humano, una sirena que quiere abandonar su hogar en el mar para vivir entre los humanos. 
Sousuke es un responsable niño de 5 años que se la encuentra en el acantilado, la salva, la cuida y le pone nombre. Ponyo prueba su sangre y eso hace que ella pueda convertirse en humana. Su padre, el hechicero Fujimoto no quiere que su hija sea humana y trata de encerrarla, pero ella se escapa y derrama la poción mágica que devolvería la vida al mar. Esta película, como muchas de Miyazaki es también una crítica a la contaminación de los mares y al ser humano que lo hace. 
El mar se despliega inundándolo todo de agua y vida, el planeta se encuentra en peligro, creaturas prehistóricas y fenómenos geográficos suceden en la tierra, mientras Ponyo se transforma en humana sin permiso de sus padres. En la Sirenita de Andersen vemos que transfomarse en humana implica un gran dolor. Es un sacrificio cambiar de naturaleza, esto anticipa el triste desenlace. Para Ponyo no es un sacrificio, ella tiene un gran poder y en ella está la naturaleza humana implicada. Ambas son seres ambiguos con una doble condición: una representa su parte más salvaje y la otra su parte más racional.
Sin embargo, la de Ponyo es una historia feliz. Si se queda como humana con Sousuke perderá sus poderes, pero él deberá prometer "amarla por lo que ella es" o desaparecerá como espuma de mar. A esto le llaman "prueba de amor sagrada" que queda felizmente realizada.  En la historia de la Sirenita de Andersen ella podrá seguir siendo humana si es amada por el príncipe, lamentablemente el príncipe ama a otra y ella queda condenada a desaparecer como espuma de mar. Ella es rechazada pero consigue un alma por su bondad. En teoría las sirenas no tienen alma. Para los griegos las sirenas eran monstruos fatídicos con melodiosa voz... 
Ponyo es llamada Brunilda en el mundo marino y tiene un lugar y un bagage. Pero no tiene libertad. Ella anhela unos pies y unas manos capaces de actuar y trasformar el mundo. Ella quiere ser humana por Sousuke pero también por su naturaleza curiosa, subversiva y distinta a todo lo que la rodea. Así, a veces, hay personas distintas que no encajan en el lugar donde están, pero cambiar de habitat implica perder ciertas habilidades. Ahora, Ponyo vivirá entre hunanos como lo desea, pero no tendrá poderes y dependerá del amor de Sousuke. En general siempre necesitamos estar rodeados de amor, los humanos somos seres muy sensibles al cariño.
Un historia muy tierna destinada al público infantil pero con un trasfondo muy interesante y profundo.


La banda sonora dirigida por Joe Hisaishi